Un niño desde que nace está en constante aprendizaje. Sin embargo, hay que tener en cuenta que no todos tienen la misma capacidad cognitiva y a algunos les puede costar aprender más que a otros o necesitarán otros métodos de aprendizaje. Por suerte, hoy en día existen muchos métodos educativos y el juego, es uno de ellos.

Asimismo, el juego es la base para el desarrollo de conocimientos, competencias sociales y emociones. A través del juego, los niños aprenden a forjar vínculos con los demás, a compartir, negociar y resolver conflictos.

También, a medida que va transcurriendo el tiempo, los juegos van cambiando adaptándose a la adquisición del lenguaje y del conocimiento que los más pequeños van adquiriendo en cada etapa educativa.

Métodos educativos: El juego didáctico

Para empezar, cuando hablamos de juegos didácticos nos estaremos refiriendo a esas técnicas de enseñanza que utilizan la diversión cómo método de aprendizaje. Por consiguiente, aprender jugando fomenta la retención de conocimientos de manera activa, ya que para un niño siempre será más fácil recordar algo en lo que se ha divertido. Además, los expertos afirman que aprender jugando desde edades tempranas ayudar a retener mejor la información y a reforzar sus capacidades.

Por otro lado, aprender jugando siempre ha estado muy presente en el mundo de la educación pero es, en estos últimos años, que ha cobrado más importancia y más de cara a la era digital, donde las nuevas tecnologías cobran un papel fundamental en el aprendizaje gamificado, ya que existen multitud de plataformas a través de las cuales los más pequeños pueden aprender mientras se divierten.

¿Es el juego un buen método educativo para los más pequeños?

La respuesta corta es SÍ. El juego es parte de la vida de nuestros hijos y forma parte de su aprendizaje desde pequeño, no solo fomenta su capacidad cognitiva sino que promueve capacidades y habilidades como la memoria, autoestima, concentración, etc. Un ejemplo son los juegos físicos, estos trabajan las habilidades motrices del niño, con los de mesa trabajan la memorización y la paciencia.

Estos son algunos ejemplos de juegos educativos que pueder probar desde casa

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Beneficios de utilizar métodos educativos como el juego

• Fomenta el interés en materias que el niño no conocía o no le gustaban.
• Aumenta la motivación en el proceso de aprendizaje.
• Aumenta la concentración.
• Facilita nuevos modelos de aprendizaje.
• Mejora el rendimiento académico.
• Proporciona un feedback inmediato.
• Facilita el desarrollo de la competencia digital.
• Favorece las relaciones sociales.
• Hace de el aprendizaje un proceso divertido. 
• Facilita el desarrollo de soft skills (creatividad o el trabajo en equipo).
• Estimula la creatividad.
• Mejora la capacidad para asumir riesgos.
• Capacidad de resolver problemas y tomar decisiones.

Por todo esto y mucho más, no dudes en alternar el aprendizaje tradicional con el aprendizaje mediante juegos. Tu hijo, su futuro y su ámbito académico te lo agradecerán.

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